Ustedes ya saben como termina la frase que adorna el título de ésta entrada, y muy poco se equivoca ese dicho.En las últimas semanas ha crecido la atención hacia la campaña "Yo anularé mi voto" que como se había dicho, nació en internet. El descontento hacia los políticos no puede estar peor en estos momentos cuando la culpa a veces es de dos o más.
Pienso que la campaña en favor de la anulación del voto es la manera en que nosotros como sociedad nos estamos lavando las manos de muchos de los males que han perjudicado a México ya que es bien fácil pasarle la bolita a la contraparte y viceversa. Veamos:
- Yo anularé mi voto pero como tiro basura en la calle.
- Yo anularé mi voto aunque me pase el alto del semáforo sin importar si ocasiono un accidente, darme vueltas prohibidas o manejar en sentido contrario.
- Yo anularé mi voto y ando fumando en lugares y establecimientos donde está prohibido.
- Yo anularé mi voto mientras le sigo dando mordida al policía para que no me infraccionen o me den la licencia municipal.
- Yo anularé mi voto pero eso si, esperaré a que el gobierno me saque de pobre.
- Yo anularé mi voto pero es bien rico beber alcohol en la vía pública.
- Y la lista es larga...........................
Nosotros votamos para que algún político nos represente, y al momento que haya sido elegido, si votamos o no por él, se convierte en nuestro empleado a partir del primer día que ejerce sus funciones. Entonces, votamos para que alguien resuelva los problemas que tenemos como sociedad, no para darle poder a alguien que ni siquiera conocemos en el terreno personal.
Por eso, además de votar el 5 de Julio, hay que comenzar a exigir a los representantes de la sociedad para que nuestras demandas sean cumplidas y poco a poco nos vayamos dirigiendo hacia una verdadera democracia y tener un verdadero Estado de Derecho.
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